
Condenados por vestir de negro
En 1994, los adolescentes Damien Echols, Jessie Misskelley Jr. y Jason Baldwin fueron juzgados y condenados por el homicidio de tres niños en West Memphis, Arkansas.
No había ninguna prueba física contra ellos, sólo testimonios y la hipótesis de satanismo, que se basó en la vestimenta y las lecturas de Echols, principalmente.
Luego de dieciocho años en prisión, fueron liberados en 2011. El crimen continúa sin resolverse.